Podemos instalar un descalcificador de agua, para mejorar la calidad del agua dura. Según el contenido de cal, podemos distinguir entre aguas duras, blandas y medias. Las aguas blandas son las que poseen una cantidad baja de cal y las aguas duras son las que poseen un contenido mayor en cal. En cambio, las aguas de dureza media tienen un contenido moderado de cal. Las características del suelo y la zona geográfica determinan la composición del agua. Cada vez más hogares cuentan con un descalcificador de agua para mejorar la calidad y el sabor del agua del grifo.
Desde el diario EuropaPress informan que «más del 70% de los hogares españoles se ven afectados por la cal, un problema invisible pero con consecuencias notables en la vida cotidiana». Debemos saber que un agua con un alto nivel de cal no es beneficiosa para el consumo, ni para la higiene personal. Además, la cal se deposita en las partes metálicas de las lavadoras y fregaderos, pero esto provoca averías. Además, un alto contenido de cal en el agua hace que sea necesario un mayor gasto de detergente.
¿Cuáles son los tipos de descalcificadores de agua?
Los descalcificadores de agua son idóneos para disfrutar de un agua de excelente calidad. Todos los descalcificadores funcionan igual mediante el intercambio de iones, pero hay distintos tipos:
–El descalcificador volumétrico: este tipo de descalcificador sólo entra en funcionamiento cuando se alcanza un determinado volumen de agua tratada, y es el que habitualmente se instala en hogares y empresas.
–Descalcificador de bajo consumo: es muy eficiente, ya que su funcionamiento se adapta el consumo de agua y de sal de la vivienda. Se calcula que con este descalcificador el ahorro puede ser de alrededor de un 40% en comparación a otros tipos de descalcificadores.
–El descalcificador hidráulico: este descalcificador ocupa poco espacio y regenera dependiendo del volumen de agua que circula por las tuberías, de manera que funciona cuando se agota el lecho de resina. Los sistemas de descalcificación hidráulica suelen tener dos botellas de resina y no requieren conexión eléctrica.
–Descalcificador electrónico: es idóneo para combatir la acumulación de cal en el agua. Este tipo de descalcificador no necesita sal y funciona mediante impulsos electrónicos que evita que los minerales de calcio se adhieran a las tuberías y electrodomésticos. El consumo de energía es bajo y la instalación es sencilla.
–Descalcificador de intercambio iónico: este descalcificador funciona intercambiando iones de calcio y magnesio por iones de sodio. Es idóneo para eliminar la acumulación de cal en aguas duras y aumenta la vida útil de los electrodomésticos. Otra de sus ventajas es que mejora la calidad del agua.
Recomendaciones para elegir el descalcificador
Los profesionales de la empresa Agua controlada, especialistas en tratamientos del agua y en la instalación de equipos de filtración y descalcificación de aguas, nos explican que es necesario tener en cuenta los siguientes factores para elegir el descalcificador adecuado para nuestro hogar:
Lugar de residencia
El tipo de vivienda podría afectar a la presión del agua, por lo que no es lo mismo vivir en una casa que un piso. También hay que tener en cuenta el diámetro de las tuberías, ya que varía y eso afecta al caudal del agua.
Dureza del agua
A la hora de elegir descalcificador, debemos saber el nivel de dureza que tiene el agua de nuestra zona. Este dato es básico porque supondrá más o menos cantidad de resina para eliminar la cal del agua.
El número de personas
Antes de escoger el tipo de descalcificador, debemos tener en cuenta el número de personas que residen en el hogar. Una de las ventajas que supone tener un equipo de tratamiento de agua es por el ahorro.
Las dimensiones de la vivienda
A la hora de escoger el modelo, es necesario conocer el tamaño del sistema de descalcificación y las dimensiones de nuestro hogar. Cada sistema de descalcificación tiene sus medidas, por lo que es importante saber cuál es el adecuado y dónde nos conviene instalarlo. Para garantizar que el descalcificador funcione de manera óptima, debemos seleccionar el tamaño adecuado porque un sistema demasiado pequeño puede no ser capaz de manejar la demanda de agua de la vivienda, pero uno demasiado grande puede ser innecesariamente costoso.
La eficiencia energética
Es fundamental optar por un descalcificador que ofrezca eficiencia en el uso del agua y la sal durante el proceso de regeneración. También debemos elegir un modelo con controles fáciles de usar y funciones de diagnóstico para un mantenimiento sencillo.